Un robot con inteligencia artificial que pinta cuadros de nombre Ai-DA

Un robot con inteligencia artificial que pinta cuadros de nombre Ai-DA

Te enseñamos a Ai-DA, una mujer robot que se ha hecho famosa por haber logrado adquirir la habilidad de realizar obras de arte con una alucinante calidad. Su nombre es en honor a una matemática y escritora llamada Ada Lovelace.

El ingeniero que la ha desarrollado es Aidan Meler, comenzó a desarrollar en el robot en 2017 en Oxford y en la actualidad, después de acabar {el tiempo de aprendizaje|su periodo de aprendizaje, la robot humanoide puede de pintar un retrato en 1h.  Con pelo natural engastado, piel de silicona y dientes fabricados en impresora 3D. La robot pintora es mostrada al planeta como uno de los robots humanoides más inteligentes.

Sus cuadros han sido expuestos desde el día 12 de junio hasta el seis de julio en la Universidad de Oxford, sitio en donde han creado una sala llamada “The Barn Gallery” para que puedan ser visitados. La exposición lleva por nombre “Futuro sin garantías”, título que expresa a la perfección el periodo en el que nos hallamos con frente a la Inteligencia Artificial.

¿Vendió muchos cuadros la robot humanoide? Las críticas recibidas por los dibujos mostradas han sido satisfactorias, puesto que su forma expresionista y el hiperrealismo con el que ha pintado los retratos, ha llamado la atención a más de un versado en la materia.

Las ventas de sus cuadros han superado los pronósticos, y en apenas medio mes superaban el millón de euros. Con el dinero recolectado, han señalado que lo van a invertir en seguir desarrollando al robot humanoide, que aparte de ser trabajoso, es un proyecto muy costoso.

¿Nos encontramos frente al fin de los dibujantes? Decir eso sería excesivamente poco precavido. A pesar de ello, el arte siempre y en todo momento se ha encontrado expuesto a numerosos enfoques y también influido por la pluralidad de las influencias artística que existían en todos y cada momento. También es justo reconocer que el arte, desde los orígenes de los tiempos ha consentido con las corrientes divergentes, y en estos instantes, apenas somos capaces de comprender la punta del Iceberg de los algoritmos de la IA.

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